domingo, 26 de abril de 2009
Un adios
Mis venas se abren, mi sangre brota, mi boca ríe, mis ojos lloran, lo pienso un poco pero ya es tarde, llego el momento de suicidarme, escucho pasos, llega mi amada, las mas ingrata, la descarada, corre a mis brazos, huele a su amante, suelta su llanto en ese instante, me llama en vano, grita mi nombre, pero mi cuerpo ya no responde, solo la miro, se desvanece, escucho un grito, desaparece, ya no la siento, ya no la espero, solo me marcho, solo me muero.
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