Se fue

Un día me levante y vi la ventana abierta, camine algo indeciso y pude observar el justo momento en que emprendía el vuelo, ahí iba, sin siquiera mirar atrás, mi inspiración se fue y no dejo rastro de querer regresar, me bañe y vestí pacientemente; entonces salí a buscarla, pero ya no buscaba lo mismo, no, quería algo nuevo, algo que me hiciera olvidar el pasado, me acerque a un árbol y me senté junto a el por horas, pero nada sucedió, me recosté en el confortable pasto y observe las nubes durante un largo tiempo, pero, tampoco obtuve resultados, visite el mar, las pirámides de Egipto , la muralla china, a los monjes del Tíbet, busque en iglesias, consulte a psicólogos, salí con mis amigos, hable con mis padres, incluso, busque pareja, pero no aparecía, me había abandonado y al parecer no la volvería a ver, ya no podía escribir poemas, ni cantar con el fervor de antaño, mis dibujos eran grises y monótonos y mis pinturas crueles compañeras; la gente me preguntaba preocupada – Que tienes? Y yo solo respondía – Se fue. Una soleada mañana me levante y pensé, - Pegare carteles por toda la cuidad, no, mejor por el país, o por el mundo, y le escribiré un poema en el cartel para cuando lo lea regrese, también inventare una canción y la mandare a la radio para que al escucharla no dude en volver; puse manos a la obra y comencé, al principio no sabia que era lo adecuado para que supiera lo que siento por ella pero conforme hice los primeros bocetos y saque las primeras notas todo fue fluido y armonioso, al día siguiente me levante muy temprano, lleve mi canción a la radio y enseguida la pusieron, recorrí el mundo y pegue todos los carteles que mis fuerzas me permitieron, al terminar, tome el primer vuelo de regreso a casa y descanse por el largo viaje, esa noche al estar escuchando mi canción y contemplando mi cartel con el poema, me di cuenta que nunca volvería, pero sabía que sin duda, la noche en que cree todo para ella, durmió entre mis brazos.